sábado, 23 de diciembre de 2017

BDSM: Addendum V. F.A.Q.



Hace poco me hicieron una entrevista para un trabajo universitario donde me formularon varias preguntas que creo que tendrían cabida en un artículo para aquellos que se están iniciando, tienen curiosidad o simplemente están confundidos sobre algunos de los términos dentro de la comunidad del BDSM. En base a una sugerencia me ha parecido buena idea el darle una oportunidad a un FAQ sobre esto que nos gusta tanto:



  • ¿Qué es el BDSM? ¿Qué significan sus siglas?
 El BDSM es una forma de concebir las relaciones (tanto sexuales como personales o sentimentales) que se aleja de la norma tradicional. Lo que quiere decir es que es una serie de prácticas no convencionales que aboga por la liberación de los deseos y el disfrute, así como la exploración y el crecimiento personal.
 Sus siglas significan Bondage/Disciplina, Dominación/sumisión y Sadismo/masoquismo.

  • ¿Existe alguna condición para practicarlo?
 Que sepas sobre seguridad, que te informes sobre tus gustos y mantengas siempre una conversación con tu compañero sobre lo que ambos deseáis hacer. Aparte de eso, no existe ninguna condición para que una persona practique el BDSM, ya sea de sexo, género, religión (aunque sí hay muchas que lo prohíben expresamente), edad o condición física.

  • ¿Desde hace cuánto que existe?
  El BDSM, como "organización" (entiéndase como grupos de gente que se reunían para disfrutar y no con una agenda sociocultural per se) y comunidad, empezó a finales de los 80, principios de los 90. Como movimiento surgió a raíz de los grupos gays de leathers y sadomasoquistas norteamericanos desde finales de los 70, pero no se consolidó como un prototipo de lo que conocemos hasta hoy día hasta los 90 prácticamente.
En la práctica es algo inherente al ser humano y se pueden encontrar muestras de ello en la literatura y el arte a lo largo de la historia, desde el imperio romano (los dominus, por ejemplo) a las cortes francesas (de donde se saca mucha de la fantasía con mobiliario "gracias" a Sade) a las artes marciales japonesas (el hojojutsu fue el precursor del kinbaku desde un siglo desconocido, posiblemente el XVI-XVII hasta finales del XIX, donde se transformó en lo que ahora se conoce como kinbaku tradicional).

  • Entonces... ¿el BDSM ha cogido ideas de otros grupos y minorías?
  Sí, principalmente de grupos LGTB de finales de los 90 y su filosofía por las prácticas sexuales no convencionales (recordemos que durante muchos años el sexo entre homosexuales estaba considerado una enfermedad, igual que las parafilias y ciertos comportamientos de BDSM). De donde más se tomó fueron de los conceptos de bondage de la disciplina inglesa heterosexual y de los movimientos SM gays norteamericanos. También ha cogido mucha de su filosofía de los movimientos de amor libre de los hippies de los años 70.

  • ¿Es el BDSM machista?
 No. El BDSM se fundamenta en lo que se denomina "intercambio de poder", un término que se usa para referirse a que una persona sumisa, independientemente de su género, le da poder a la otra parte, dominante, dentro de un marco determinado por el tiempo y los límites preestablecidos.
 La clásica asociación de que una mujer a la que le guste la sumisión sexual tiene que ser, obligatoriamente, machista no es sino una creencia basada en la falta de comprensión sobre las prácticas. Una mujer PUEDE ser feminista y sumisa si así lo desea. El BDSM promulga el entendimiento entre personas adultas con gustos peculiares bajo la idea de que ambas partes consienten porque les gusta, no una imposición de roles basados en género, sexo, condición social, raza, etc... No es una ideología sino un conjunto de principios básicos que aplicar a tus relaciones sentimentales y sexuales bajo la premisa de "Puede no gustarme lo que haces pero me gusta que lo puedas hacer".
 Aunque el BDSM haya sido siempre mal visto por una parte del feminismo como una herramienta de promulgar el patriarcado y sus conductas de dominación hacia la mujer, hay que recordar que comenzó como un movimiento gay en los 70 y derivó en lo que es hoy mediante la aceptación de todos los sexos y roles que existen.
 Reducir el pensamiento sobre toda la práctica y teoría hacia el simple "no me gusta ergo no te tiene que gustar" es una forma de argumentación pobre.
  • Pero la práctica X me parece sumamente machista, ¿estás seguro?
 Sí, lo estoy. Si dicha práctica te parece machista es porque piensas que el BDSM lo es desde un principio, pero ambas personas han hablado y acordado realizar dicha práctica. Además, es altamente posible que también sea algo que se haga con los sexos intercambiados en muchas ocasiones.
 Puede haber hombres y mujeres con pensamientos machistas dentro del movimiento, pero esa gente lo sería perteneciera a él o no, y perteneciendo a él tienen más posibilidades de abrir su mente a la idea de que todos somos iguales para poder disfrutar de nuestros cuerpos con una total indiferencia sobre quienes los quieren regular. "Mi cuerpo mis normas" es un buen corolario para explicar que todos, mujeres, hombres, trans... somos individuos que debemos decidir sobre nuestras acciones y gustos. El BDSM sólo presenta una mínima cantidad de principios básicos a los que atenerse y nada más, el resto depende del individuo como tal.

  • ¿Hay prácticas en común entre la gente que le guste el BDSM? Como azotarse, pegarse, etc...
 No. El BDSM tiene en su elenco un abanico de prácticas, tanto sexuales como no sexuales, que permite su uso en un marco muy amplio. Hay prácticas comunes como las cuerdas que le gustan a muchos de sus integrantes, pero NO tiene porqué gustarle a todo aquel que diga que le gusta el BDSM. Las condiciones, técnicas y seguridad deben ser habladas o, como mínimo, mencionadas por ambas partes para saber cómo proceder dentro de una sesión.

  • ¿Y algún límite?
 En este caso sí. Hay límites comunes que son la práctica activa de relaciones o situaciones sexuales con niños, cadáveres y animales. En esencia, si no comprende lo que hace o no puede articular la palabra de seguridad por un impedimento físico o psíquico, es un límite.

  • ¿Qué sucede cuando una o ambas personas no hablan las cosas ni establecen límites?
 Ahí se entraría en una zona gris, ambas personas pueden tener suficiente experiencia como para conocer los límites naturales de otros o haberse conocido en un ambiente donde se realizan prácticas similares (por ejemplo un taller de shibari). En todo caso, si se llega a realizar algo que una persona encuentra incómodo o traumático, la persona dominante debería detener toda acción para asegurarse de que está bien.
 Antiguamente, y aún mantenido por los practicantes más veteranos e introducidos en las escenas locales, se practicaba algo llamado "metaconsenso", donde se hacía un Intercambio Total de Poder y se concedía al Dom o Domme la elección de detener la sesión sólo cuando lo decidiese. Sin embargo esta práctica es arriesgada y no se recomienda a nadie que se esté iniciando a no ser que esté con alguien cabal y experimentado que sepa interpretar reacciones no verbales de un sumiso.
 Por supuesto, todo queda a discrección de los integrantes de la sesión.

  • ¿Y si no la detiene? ¿Y si la persona sumisa no dice nada?
 Si no la detiene estaría claramente ABUSANDO de su sumiso y eso es algo TAJANTEMENTE prohibido dentro del BDSM. Si la persona sumisa no dice nada se da por sentado que hay un acuerdo tácito para continuar, pero, al igual que es el deber del Dom el detenerse cuando se le dice, es deber del sum el decirlo. En ambos casos la seguridad y confianza en la otra persona debe ser total antes de entablar cualquier clase de relación, al igual que en relaciones tradicionales.

  • ¿Por qué cosas aboga el BDSM?
 El BDSM en sí no es un movimiento político o social, es cultural y filosófico por el momento (nunca se sabe si habrá grupos que quieran hacer algo de activismo, Dios sabe que a día de hoy se necesitaría un poco de buena prensa), como tal aboga por el individualismo, por la pérdida de la vergüenza y la aceptación personal, por tener una mente abierta ante las posibilidades y deshacerte de tabúes y complejos. También hace un gran hincapié en la compenetración de pareja a la hora de comunicarse y entenderse.

  • ¿Todas las prácticas incluyen violencia de alguna clase?
 En absoluto. Un gran número (por no decir la mayoría) no incluyen violencia de ninguna clase y se basan sobre todo en estimular los sentidos y las fantasías como un método de juegos preliminares. Los juegos de rol, DD/lg y muchas clases de relaciones se pueden efectuar sin violencia alguna. Las prácticas de "contacto extremo" se pactan entre ambos integrantes de la relación y se establecen límites derivados de su experiencia y sus deseos expresos, transformando el dolor en placer.

  • ¿Cómo puede alguien disfrutar del dolor, de ser golpeado...? 
 Cada uno tenemos razones particulares para ello, tanto físicas como psicológicas. Podemos disfrutar tanto la sensación como la liberación como la espera antes de que el golpe llegue. Sea en forma de azotes, bofetadas o latigazos, hay que tener en cuenta la expectación, la situación y la persona en cuestión. Existen muchas clases de masoquismo y muchas razones para disfrutar del dolor.
 De todas formas, las series de televisión y las películas (que suelen ser el método de introducción al BDSM por parte de mucha de la población) exacerban las prácticas SM para causar más impacto a su audencia. Dichas prácticas tienen un rango muy amplio y pueden quedarse en lo más suave, como unos azotes, o a lo más extremo, como una sesión de latigazos colgado boca abajo mientras clavan agujas en tu piel. Está en el ojo del observador decidir qué es placentero y qué no.

  • En una ocasión abusaron de mí y he descubierto que me gusta el BDSM, ¿Tengo un problema? ¿Debería buscar ayuda?
 No, mucha gente con traumas pasados busca en el BDSM refugio y control, hasta dentro de la sumisión. Si CREES que necesitas ayuda porque ves que el BDSM te causa empeorar tu trauma, por favor, busca ayuda profesional. Si simplemente te consideras una persona rara y te encuentras incómoda porque encuentras placer en someterte o dominar a alguien después de un hecho traumático, hay gente como tú que encuentra en estas prácticas algo de paz y control sobre su vida.
Sin embargo te recomiendo hablarlo con alguien que tenga experiencia personalmente para que te dé su opinión puesto que cada caso es único y esto es algo general.

  • ¿Hay más mujeres Dominantes que hombes?
 Eso no es sino estadística pura. Si buscas por mujeres Dominantes o Switch encontrarás sin esfuerzo alguna, que sean tan abundantes como los hombres Dom es otro cantar. A día de hoy no existen estadísticas fiables sobre qué porcentajes de la población pertenecen a qué rol puesto que la mayoría de la gente lo lleva o en secreto o no piensan en participar en estudios sobre su sexualidad. Sin embargo, un paseo por los foros y grupos más populares, te mostrarán que la gente más activa a la hora de buscar contrapartida son los hombres sumisos, mientras que los Doms son los que a más gente se introducen.
 Basándome en una estimación meramente personal sobre esta observación diría que los Doms superan a las Dommes con un margen respetable, mientras que dentro del rol Switch, las mujeres superan a los hombres por mucho. Respecto a la sumisión, hay más mujeres que hombres sin duda, pero son ellos los más activos dentro de las comunidades y escenas locales.

  • ¿Existen asociaciones de gente a la que le guste el BDSM y se reuna para hablarlo y practicarlo?
 Sí, existen varias asociaciones (tanto en España como en el mundo) que hacen eventos, charlas informativas, reuniones, talleres... estos eventos suelen ser muy informales y no suelen haber ninguna clase de actividad sexual (quizá alguna performance de cuerdas podría darse como ejemplo), sirviendo así como método introductorio para la gente nueva que quiera descubrir o conocer a otras personas dentro de la escena local.
 Para practicarlo tendrás que ir a un local expresamente indicado para ello, con lo que se denomina "mazmorra" o "sala de juegos". Un lugar establecido con mobiliario y herramientas para practicar el BDSM ya sea en privado o grupal y que esté protegido mediante privacidad y seguridad del resto de las personas vainilla.

  • Si voy a uno de esos sitios, ¿no me vendrá alguien a intentar unirse/someterme/que le someta?
 No por norma general. Estos sitios son llevados teniendo la seguridad como una prioridad. El protocolo es importante y en la mayoría de los lugares no te dejan entrar a sus salas privadas a menos que vayas acompañado o seas conocido o recomendado. Si alguien te pregunta si puede participar deberías poder rechazarle sin detrimiento alguno, en caso contrario deberías notificárselo a cualquier miembro del staff para que ese comportamiento no se produzca. No es algo que suceda habitualmente, pero si pasa, hay medidas para controlar esa clase de comportamientos.

  •  Si después de una sesión extremadamente dura me encuentro algo mal, ¿qué hago?
 Dentro de los deberes del Dom está el denominado "aftercare", que son una serie de cuidados para asegurarse de que su sumiso goza de una salud física y mental como antes de efectuar su sesión. En caso de que haya habido algún problema o dificultad durante la misma, el sumiso debería poder decírselo para buscar una solución entre ambos.
 Los métodos de aftercare varían entre personas.

  • ¿Todo el mundo se rige por estas normas?
 No. Dentro de este mundillo hay mucha gente que usa el BDSM para atraer a gente con la que follar sin cuidado, al igual que en las relaciones tradicionales (mírese la fauna que a veces se encuentra en Tinder, por ejemplo). Se puede resumir en una simple pregunta para saber si una persona se rige por el código del BDSM o es alguien que se quiere aprovechar: "¿Esta persona se preocupa más de sí misma o de ambos?". Mantener un equilibrio es muy importante para no entrar en comportamientos egoístas o abusivos, sean enfocados a la otra persona o a uno mismo.
 Si te ha llegado a preocupar o bien lo hace en el momento en el que lees esto, planteate si tu relación, por placentera que sea, merece la pena el ser continuada.

  • ¿Incita el BDSM a la poligamia? ¿Y a la bisexualidad?
 No. Existe gente polígama/poliamorosa y existe gente bisexual dentro del BDSM, al igual que otras variantes que no hace falta decir.
 Bajo ningún concepto una persona puede forzar a otra a realizar una práctica que no desea, y eso incluye prácticas con gente de tu mismo sexo o con más personas. De igual manera tener un Amo que quiera tener más sumisos cuando en ningún momento habéis hablado de una relación abierta o poli, es una ruptura de confianza. No debería permitirse si no se ha hablado antes.

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