miércoles, 12 de julio de 2017

BDSM: Introducción XI, Técnicas y escenarios



Cuando hablo de técnicas me refiero a ciertas prácticas que pueden ser comunes o totalmente personales que se realicen durante una sesión, mientras que los escenarios se refiere al ambiente, emplazamiento y situación donde se vayan a realizar.

No pretendo que esto sea un compedio de técnicas e ideas para ninguna de las dos cosas porque eso es algo que cada uno tiene que desarrollar personalmente con quien las vaya a poner en práctica. Sin embargo más abajo enlistaré unos cuantos ejemplos de ambas cosas, advirtiendo que no deben ser tomados al pie de la letra y que la improvisación es más que habitual durante los escenarios.


En algunas ocasiones nos encontramos con alguien que desea hacer algo en especial, una fantasía o un anhelo que llevan tiempo queriendo realizar desde hace tiempo y que, por fin, han sido capaces de confesar. También se da el caso opuesto, donde somos nosotros mismos quienes queremos algo que, bien por vergüenza o bien por temor, no hemos sido capaces de confesar hasta ahora.
Pero el momento ha llegado, ambas partes habéis accedido a ello y no tenéis idea de qué hacer.
¿Ahora qué?




Los escenarios

Aunque muchas cosas en este mundillo no requieren preparación y simplemente es cuestión de dejarse llevar por la corriente, la planificación previa algunas veces da resultados más que satisfactorios.
Tomemos por ejemplo a alguien que quiere probar las cuerdas en bondage de sumisión. Se podría someter a esa persona en la cama mediante la fuerza y tratar de atarla entre sus retuerzos y sus patadas, mientras que el plan previo sería dejar cuerdas preparadas y escondidas en un lugar concreto (como debajo del colchón) y en el momento menos esperado atar sus muñecas y tobillos rápidamente con nudos corredizos o autocolapsados.
Ambos casos son escenarios porque han creado un ambiente (por sorpresa/mediante subterfugios), una situación (rápida y con violencia/lenta y con sensualidad) y un emplazamiento (la cama).
El ir por una ruta u otra dependería de vuestras preferencias personales, pero en ambos casos lo que habéis hecho ha sido crear un escenario.

Si bien la creación del escenario tiende a ser parte de la preparación del Dom, y más concretamente de una de las partes de la "dominación mental", es cierto que el sumiso tiene en su poder dejarse llevar o reaccionar de cierta manera para continuar con la sesión.
En el caso de la tortura, el implorar o el mostrar afecto aun a pesar del dolor tiende a ser una gran parte de la excitación para el Dom, además de ser una fuente de información sobre cómo transcurre la sesión.
Por eso, para realizar un buen escenario, ambas partes deben colaborar, aunque una lo cree y la otra se deje llevar.

Como he dicho poco más arriba, el papel del Dom es el de director de orquesta. Debe saber qué le gusta a su sumiso de la misma forma que saber aplicarlo a sus gustos personales.
Después debe pensar en una manera de realizarlo de forma segura, y aún más si es la primera vez que se realiza alguna práctica.
A continuación debe crear un ambiente; para ello el usar la disciplina o la seducción son buenas formas para conseguirlo. La disciplina requieriría fuerza y firmeza, una voz dura y cruel, autoritaria. La seducción requeriría una forma algo opuesta: suavidad y delicadeza, caricias y susurros. Luego vendría el transformar el guante de terciopelo en la mano de hierro.
Las dos formas tienen resultados distintos, pero no olvidéis que es posible mezclar ambas según cómo seáis, esto no deja de ser un ejemplo después de todo.
Por último está el emplazamiento. Tener un lugar donde molestias ajenas sean mínimas es necesario, al igual que el que sea propicio para el escenario. No es igual una sesión de cuerdas en una habitación que en un baño, aunque ambas puedan tener los mismos resultados.

De nuevo, la importancia de saber qué quieres y cómo realizarlo se entremezcla con la necesidad de conocer a tu pareja para que ambos disfrutéis.

Las técnicas

Entiendo por técnicas a la realización de una o más prácticas durante una sesión cuando una persona le da un toque particular y distintivo. Como bien sabéis no todo el mundo es igual, aún menos en la cama, por ello el uso de técnicas es el elemento que diferencia a una persona de otra dentro del BDSM.
El cómo combine sus prácticas determinará su técnica, haciendo de cada individuo un ente único y personal. Lógicamente lo ideal es que tu pareja disfrute tanto de tu técnica como tú de la suya, pero eso es algo que se tiene que amoldar con la práctica y el entendimiento.

No hay que confundir este término con el de "experiencia". Si bien las técnicas que cada uno desarrolle están implícitas dentro de la experiencia no tiene que ver la segunda con las primeras.
El uso de las cuerdas con la dominación física y verbal, spanking con juegos de rol, voyeurismo con exhibicionismo... estas combinaciones de prácticas generarán nuestras técnicas que usaremos, en menor o mayor grado, con nuestras parejas y es por ello que debemos buscar el cómo desarrollarlas.

¿Cómo descubrimos técnicas nuevas? Esa es la pregunta del millón. No hay una forma predeterminada de encontrarlas puesto que tienen relación con nuestros gustos y nuestros deseos. En mi caso personal puedo decir que leyendo historias o relatos he encontrado buenas ideas que aplicar a las mías, al igual que hablando con gente de la escena, viendo películas... para desarrollar una técnica sólo hace falta imaginación para aplicarla a tu vida y a la de tu pareja. Comenzar elaborando una lista de deseos que queráis hacer junto a vuestra pareja y que a su vez ella haga lo mismo es un paso para poner en común, sin tabúes, las ideas que podríais tener para el futuro. Desde ahí elegir una y desarrollarla mentalmente para saber cómo queréis que salga es el principio de lo que podríamos llamar técnica. Una vez realizada el anotar mentalmente qué se podría mejorar o qué se podría cambiar es un paso necesario para desarollarla.
No tengáis miedo a probar cosas nuevas si las habéis dado suficiente tiempo macerando en la cabeza.


Haciendo un pequeño resumen podemos concluir diciendo que el escenario es la representación física de una idea, incluyendo un entorno, un ambiente y una serie de condiciones que deben cumplirse según lo planeado o improvisado mediante lo que dispongamos. La técnica, por otra parte, es la utilización de herramientas o prácticas de forma acorde a nuestros gustos en el escenario que hayamos creado o se nos haya provisto.
No os centréis demasiado en el desarrollo de un escenario o de vuestra técnica particular, centráos en pasarlo bien y tomad este artículo como una forma para pensar en más opciones para vuestras sesiones.

"No temo al hombre que haya practicado 1000 patadas una vez. Temo al hombre que haya practicado 1 patada 1000 veces". — Bruce Lee

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