viernes, 21 de julio de 2017

BDSM: Las prácticas más peligrosas y extremas



A lo largo de mis múltiples contactos con la gente de la comunidad me he encontrado con múltiples prácticas que rozan la locura para una persona que no entienda esta forma de vida que es la nuestra.
Dichas prácticas sólo las califico como extremas cuando suponen un riesgo para la integridad física o psicológica de uno de sus practicantes o un riesgo para la seguridad de terceros, que incluiría el delito. Obviando que cualquier práctica sin una buena técnica o conocimientos de seguridad se puede volver peligrosa para la integridad de quien la recibe, las detalladas más abajo son aquellas que tienen un riesgo inherente a sus integrantes o terceros.

Es evidente que la mayoría de nosotros disfrutamos de lo que nos place como nos apetece sin hacer daño a nadie excepto cuando nos lo piden o lo pedimos nosotros, pero estas prácticas pueden acarrear un daño real más allá de la sesión en donde las realicemos, pudiendo dejar secuelas a largo plazo.
Si bien personalmente me opongo a todo aquello que deje marcas permanentes admito que muchas personas no se conforman con menos y requieren de dichas prácticas para su disfrute correspondiente.


ADVERTENCIA: Esto son sólo algunos de los ejemplos más extremos que he encontrado. De ninguna manera deberían ser probados por nadie inexperto (para probarlo podréis encontrar foros donde preguntar por métodos en los cuales introduciros lentamente).
Desaconsejo su uso de "quiero probar algo nuevo" hasta que estéis realmente convencidos de que ambos estáis listos y preparados para realizarlas.




Sadismo Emocional

El sadismo emocional es una práctica derivada de la humillación extrema. Su principal diferencia radica en una manipulación de los sentimientos en lugar de otras partes psicológicas como puede ser la humillación convencional (hablar sucio, dibujar en el cuerpo, relaización de tareas degradantes...). Dependiendo de la clase de dominante que lo efectúe puede llegar a confundirse con abuso rápidamente, pero es algo bastante extendido en las terapias de dominación como método catártico para el sumiso.
Mi recomendación para esta práctica es que sólo se use con alguien con empatía y que, como con la humillación, se establezcan límites de antemano. Su uso sin preparación puede reabrir viejos traumas o ahondar en unos ya establecidos. Manipular la psique de alguien es algo sumamente peligroso y debe tratarse como una práctica extrema y no como "algo que dices en el calor del momento".

CBT

Algo comúnmente extendido en ambientes de FemDom y con masoquistas extremos, el CBT (Cock and Ball Torture o Tortura de Polla y Huevos en español) consiste en una serie de golpes o abusos físicos a los genitales masculinos. Comúnmente en forma de patadas pero no reducido a ello en absoluto. Una de las técnicas más extremas de CBT son las agujas uretrales, unas agujas especialmente indicadas para su inserción en la uretra masculina.
Es obvio porqué una práctica así estaría en esta lista. Aunque sea extendida y buscada por muchos sumisos debe llevarse y tratarse con sumo cuidado, pues las heridas y lesiones permanentes no suelen ser raras cuando se abusa tanto de zonas tan sensibles.
Recomiendo que si os vais a internar en las maravillas rompehuevos del CBT tengáis la palabra de seguridad siempre en la punta de la lengua y empecéis muy lentamente, en progresiones de fuerza a la hora de golpear y de profundidad cuando sondeéis con las agujas.

Exhibicionismo Público

¿Quién no disfruta de vez en cuando de hacer cosas obscenas en público sin que nadie se dé cuenta de lo que está sucediendo? Una práctica que personalmente encuentro sumamente grata pero que se puede volver extrema cuando el público es activamente consciente de lo que sucede. Esta suele ser una de esas prácticas que tienden a aparecer en televisión o series para denostar el BDSM y suelen ser señaladas como deplorables por la gente común de a pie.
En el momento en donde haces partícipe de tus juegos a terceras personas sin su consentimiento ya deja de ser una práctica para convertirse en un delito, así que sé consciente que si te pillan pueden encarcelarte por exhibicionismo y desorden público si alguien te denuncia. Quiero dejar claro que encuentro una gran diferencia entre hacer cosas en público con la intención de que se vea y hacer cosas en público por el morbo de si te pillan. Uno busca activamente el anonimato, el otro busca la atención.
Si sigues queriendo practicarlo mi recomendación personal es que elijas una ruta y una hora por donde sepas que no va a pasar demasiada gente, aún menos niños, al igual que elegir zonas poco transitadas o con callejuelas en caso de que algo salga mal. Que alguien te siga con ropa y para mantener un mínimo de seguridad sería recomendable, por supuesto.
Si deseas realizar esta clase de actos en entornos controlados recomiendo empezar por clubs de BDSM o playas/piscinas nudistas e ir aclimatándose a los entornos.

Juegos Eléctricos

La contracción repentina de los músculos, ese shock de dolor súbito que desaparece igual que ha llegado... los juegos con electroestimulación no son raros en absoluto, pero son peligrosos cuando quien los usa no posee el material adecuado o la experiencia suficiente. Los juguetes de prácticas con electricidad vienen en muchas formas y de muchas intensidades distintas pero si no son de buena manufactura pueden fallar sus capacitadores o sus potenciómetros y causar fallos que pueden provocar quemaduras o espasmos, dependiendo de la localización y la potencia de la herramienta pueden provocar un espasmo de glotis o incluso un paro cardíaco.
Esta práctica puede ser divertida agregarla al repertorio de tortura, pero hay que desconfiar de lo objetos baratos de manufactura china (aliexpress, te miro a ti), por eso recomiendo invertir un poco más en pulsómetros y zappers que tengan algo más de calidad, especialmente si son orientados para zonas sensibles.

Agujas

Cualquier forma de sadismo se considera extrema cuando incluye cortes o perforaciones que puedan dejar marcas permanentes, al igual que lesiones si no se tiene ningún cuidado. El uso de agujas temporales en algunas sesiones no es algo tan extraño y es una práctica no muy rara en modders corporales. En el BDSM se utiliza principalmente como algo que mezcle lo visual con lo sensorial, creando patrones en la piel del sumiso a la par que haciéndole sentir el frío metal cruzando su piel.
Las zonas pueden variar al gusto de ambos y la duración no debería excederse a que el agujero creado tenga tiempo a empezar a cerrarse puesto que la herida se convertiría en cicatriz rápidamente.
Si queréis comenzar a usar agujas estudiad un poco de anatomía para aseguraros de no romper vasos sanguíneos, practicad con carnes, usad guantes y SIEMPRE utilizad agujas nuevas para cada sesión.

Consensual Nonconsent

Aunque sea una de las prácticas más frecuentes dentro de relaciones de sadismo/masoquismo, roleplay y dominación, no deja de ser una de las más denostadas por la ligereza con la que se trata. El consensual nonconsent (o "no consentido consensuado" en su traducción literal) consiste en un juego de rol en donde se representa el abuso físico de un dominante sobre un sumiso por placer de ambos. La fuerza física y el comportamiento animal suelen ser las señas más características para esta práctica, pero hay que tener en cuenta el impacto psicológico que puede crear.
Obviamente la parte importante del nombre radica en "consensual", el cual, de no estar consensuado, es una violación Y NO TIENE QUE VER CON EL BDSM. Esta práctica debe ser hablada antes de ser llevada a cabo para establecer los límites físicos y psicológicos de cada uno de los integrantes. Hacer un rol como víctima y otro como atacante puede conllevar múltiples impactos negativos si no se ha hablado bien con anterioridad. Si vais a ponerlo en práctica y es la primera vez que hacéis algo semejante seguid ciertas reglas:
  • Nada de armas: Aunque le diese realismo a la situación el uso de armas blancas durante la sesión causa más daño que morbo. Si la "víctima" se resiste aunque sea levemente se corre el riesgo de cortes o laceraciones accidentales.
  • La palabra de seguridad siempre en la punta de la lengua: Aunque sea algo que se tenga que tener siempre en mente, cuando se trata de prácticas extremas se debe recordar la palabra antes de comenzar, aun sin haber sido usada con anterioridad.
  • La fuerza está bien pero no es lo único que se debería usar: Imponerte a tu sumiso con mera fuerza física puede ser lo que se busca, pero siempre hay más formas, investiga qué es lo que os atrae más a ambos.
  • La ropa se rompe y pedir que alguien se la quite lleva tiempo y corta el rollo: Las prendas, en concreto la ropa interior, son complicadas de quitar si no se tiene la colaboración de la otra parte. Si es así pactad el que lleve ropa interior barata para poder dar un efecto mayor a la escena. Algo más caro pero te eliminas uno de los mayores muros para la práctica.

(En caso de duda quiero decir que condeno cualquier clase de abuso que no sea consentido por dos adultos que hayan decidido practicarlo en la intimidad, con información y ganas por ambas partes).

Si este artículo os llama la curiosidad más adelante haré una segunda parte con prácticas menos conocidas.

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